El jardinero de los Filis se colocó a dos boletos de la marca criolla en abril
CARACAS.- “Estoy tratando de ser más paciente en cada turno al bate”, dijo Odúbel Herrera a MLB.com. “Y eso me da un montón de buenos resultados, así que voy a seguir tratando de hacerlo”.
Efectivamente, tras un lento inicio de temporada, el criollo comenzó a mostrar su mejor juego, especialmente desde que abogó por la paciencia en el plato.
El jardinero de los Filis de Filadelfia acumuló de 26-6 y tan solo seis pasaportes en los primeros siete choques de la campaña, arrojando .231 de AVG y .310 de OBP que contrastan con los .326 de AVG y .515 de OBP en los últimos quince duelos, sin contar la jornada de este viernes.
Herrera, de 24 años de edad, acumula 22 boletos en el primer mes de campaña y se ubicó a dos de la marca para un criollo en poder de Edgardo Alfonzo (24, en 2000) y Bob Abreu (24, en 2006). Abreu alcanzó 23 en 2011 y Marco Scutaro 22 en 2009.
Todo indica que la paciencia en el plato comenzó a dar sus frutos para el venezolano; hasta el punto de que ahora en tan solo 22 juegos ya tiene seis boletos menos a la cantidad total que recibió en 2015 (28BB en 147JJ).
El propio Odúbel aseguró que, a pesar de ello, aún trabaja en mejorar la mecánica de su swing y el enfoque con el fin de disminuir la cantidad de ponches.
Durante su primera campaña completa en las mayores el criollo alcanzó 129 abanicados, la máxima cantidad para un nativo en su zafra estreno.
“Cada vez que me ponchaba, me odiaba. Y mi padre me lo hizo saber también”, dijo el jardinero, quien acumula siete juegos seguidos abriendo como primer bate. “Ahora me enfoco en poner la bola en juego y llegar a la base como sea”.
“Es un bateador inteligente, y creo que está empezando a entenderlo”, dijo Pete Mackanin, piloto de los Filis.
Exprime a los lanzadores
Odúbel Herrera ocupa el segundo lugar en las mayores con 4.85 lanzamientos vistos por aparición en el plato. También es segundo en todas las mayores con 36,1 por ciento de tasa de foul, un total de nueve por ciento por encima del promedio de la liga.
El criollo no hace swing mucho menor que el resto de la liga (la tasa promedio es de 45 por ciento) y él está en 43 por ciento; la diferencia viene cuando no hace swing con los lanzamientos fuera de la zona de strike. La tasa promedio de la liga es de 34 por ciento y Herrera acumula 28 por ciento con pitcheos malos. Sin duda, ha madurado en el reconocimiento de su zona.
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